Desde guías para transformar planificaciones hasta detectar dificultades para abordar el currículum, el nuevo Manual de Uso de ChatGPT de la Facultad de Educación de la UDD da directrices y ejemplos que ayudan a docentes a generar aulas más inclusivas.
En el panorama educativo actual, la inclusión es uno de los grandes desafíos que enfrentan los profesores, quienes buscan garantizar que todos los estudiantes, independientemente de sus capacidades y diferencias individuales, tengan acceso a una educación de calidad. En este contexto, la Inteligencia Artificial Generativa (IAG), representada por herramientas como ChatGPT, ha emergido como un apoyo valioso para los educadores en su esfuerzo por crear aulas más inclusivas.
Es por esto que la Facultad de Educación de la Universidad del Desarrollo lanza un nuevo Manual de Uso de ChatGPT, esta vez para Aulas Inclusivas, con guías para transformar la planificación, ejecución y evaluación de la enseñanza, en instancias más inclusivas.
A continuación, destacamos algunas recomendaciones clave para que los docentes aprovechen al máximo esta herramienta en el contexto de la educación inclusiva:
1. Formular objetivos claros y accesibles
Una de las principales recomendaciones es asegurarse de que los objetivos de aprendizaje sean inclusivos desde su formulación. ChatGPT puede ayudar a adaptar los objetivos de tal manera que todos los estudiantes, incluidas las personas con discapacidades sensoriales o dificultades de aprendizaje, puedan participar activamente. Por ejemplo, es posible pedir a ChatGPT que simplifique un concepto complejo o lo explique utilizando ejemplos visuales para estudiantes que necesiten apoyo adicional.
2. Crear prompts específicos y adaptados
El éxito del uso de ChatGPT en el aula depende de cómo se formulen los prompts (instrucciones). Es esencial que estos sean claros y específicos, reflejando las necesidades de los estudiantes. Verbos como «adaptar», «simplificar» o «demostrar» pueden guiar al modelo a generar respuestas que apoyen el aprendizaje inclusivo. Así, un docente podría pedir a ChatGPT que explique un proceso de manera que sea comprensible para estudiantes con dificultades de comprensión verbal o visual, por ejemplo.
3. Fomentar un ambiente inclusivo
Además de personalizar la enseñanza, ChatGPT puede ayudar a fortalecer la colaboración y el respeto en el aula. Por ejemplo, los profesores pueden utilizar esta herramienta para generar preguntas y actividades que promuevan la participación equitativa y tengan en cuenta las diferentes culturas y antecedentes de los estudiantes. Esto es crucial para mantener un ambiente de respeto mutuo y comprensión en aulas diversas.
4. Innovación en la evaluación
El manual también destaca cómo ChatGPT puede asistir en el diseño de evaluaciones inclusivas, proporcionando variedad en los formatos y productos que se utilizan para medir el aprendizaje de los estudiantes. Desde cuestionarios accesibles hasta actividades interactivas, la herramienta puede adaptarse a diferentes estilos de aprendizaje y capacidades, asegurando que todos los estudiantes tengan la oportunidad de demostrar su conocimiento.
5. Consideraciones éticas
El uso de IAG en educación no está exento de desafíos éticos. El manual recomienda a los docentes ser conscientes de los límites de la tecnología y garantizar siempre que el contenido generado sea revisado para evitar sesgos o imprecisiones que puedan afectar negativamente a ciertos grupos de estudiantes. Además, es crucial mantener la privacidad y seguridad de los datos de los estudiantes.
“ChatGPT se presenta como un aliado en la construcción de aulas inclusivas, permitiendo a los profesores diseñar experiencias de aprendizaje más equitativas y accesibles”, destaca la directora del Programa de Formación Pedagógica y una de las autoras de este manual, Gilda Bilbao. “Su capacidad para generar respuestas contextuales y adaptarse a las necesidades específicas de los estudiantes, sin duda lo convierte en una herramienta valiosa para el trabajo docente”, concluye.
Accede al manual completo aquí.
