De acuerdo a un informe de la Facultad de Educación UDD, entre 2015 y 2023 se cerraron 745 colegios, mientras que solo se abrieron 193, lo que se traduce en 552 escuelas menos para los niños y jóvenes en etapa escolar.
Un nuevo estudio de la Facultad de Educación de la Universidad del Desarrollo, realizado por su vicedecano, Mauricio Bravo, y el académico Isaac Fierro, revisa el número de establecimientos educacionales existentes en nuestro país y cómo ha variado en la última década, utilizando datos obtenidos del Directorio de Establecimientos y del Sistema de Admisión Escolar del Ministerio de Educación.
De esta manera, el informe muestra que desde el año 2015, se ha registrado el cierre de 745 centros educativos, una cifra que preocupa, sobre todo al contrastarla con la apertura de solo 193 nuevos establecimientos educacionales en el mismo período. Esta diferencia genera una brecha significativa entre la demanda de matrículas escolares y la oferta de establecimientos educativos.
“Esta reducción neta de 552 instituciones podría tener consecuencias relevantes en la oferta educativa del país”, comenta el vicedecano Mauricio Bravo, agregando que “el 2021 observamos una disminución de los cierres, que podría haber estado influenciada por factores atípicos como la pandemia, los que provocaron cambios temporales en las políticas educativas para mantener la continuidad de clases, incluyendo posibles apoyos de emergencia o prórrogas en los cierres”.
Frente a este escenario, los académicos analizan las causas de este aumento en los cierres: “las regulaciones introducidas por la Ley de Inclusión Escolar en 2015, la cual establece restricciones para la creación de nuevos colegios, posiblemente han limitado la diversificación y la calidad de la oferta educativa”, afirma el vicedecano. “Específicamente, la normativa prohíbe la entrega de subvenciones a nuevos establecimientos a menos que exista una demanda insatisfecha y que los posibles nuevos sostenedores sean propietarios del inmueble, lo que dificulta la inversión inicial y desincentiva la apertura de nuevas escuelas”, concluye.
Al estudiar los datos por tipo de dependencia de los establecimientos, el informe revela que el 2019, los particulares subvencionados lideraron el cierre, con un 70% del total. En el periodo 2016-2023 en promedio el 29% de las escuelas cerradas eran municipales, 64% particulares subvencionadas, 6% particulares pagadas y 0,3% SLEP.
Cuando se analizan los datos por región, se observa una tendencia de cierre de escuelas especialmente en zonas urbanas, lo que podría comprometer seriamente la capacidad del sistema educativo para responder a la demanda de matrículas. La Región Metropolitana encabeza la lista de cierres a nivel nacional, con un 29%, seguida por la de Los Lagos, con un 16%, y Los Ríos y Valparaíso, con un 9% cada una.
“Las cifras obtenidas hacen evidente la necesidad de implementar políticas públicas que aborden estas problemáticas de manera integral. Se propone modificar la Ley de Inclusión para facilitar la apertura de nuevos colegios, eliminando barreras como el requisito de propiedad del inmueble”, afirma Mauricio Bravo, agregando que “y sugerimos implementar un sistema de incentivos para colegios que busquen mejorar su oferta educativa, así como fortalecer el Sistema de Aseguramiento de la Calidad para garantizar el mejoramiento continuo en todos los centros educativos”.
Accede al estudio completo aquí.